viernes, 3 de enero de 2014

Ningún significado.

Las lecciones 1 y 2 de UCDM hablan de la falta de significado de todo lo que percibimos. Comienza el Curso a corregir nuestro sistema de pensamiento de manera delicada, pero firme. No debemos engañarnos, el texto y las lecciones se proponen cambiar por completo nuestros objetivos, y no se demora en hacerlo.

Nada de lo que veo tiene algún significado.

Esta lección nos inicia en una práctica importante, la de observar todo lo que percibimos desde aquel que toma la decisión de no dejarse afectar por ello. Este "que decide" elige no implicarse en lo percibido porque dentro de sí, tiene la absoluta certeza de que el mundo percibido no es más que la interpretación mental que hacemos de este. Qué significado puede tener aquello que yo mismo he decidido percibir de uno u otro modo. Ninguno intrínseco, ninguno por sí mismo.

Todo lo que percibo tiene el significado que yo mismo le otorgo.

De ahí que deba elegir otro significado. Si soy yo mismo quien decido ver una ofensa, un conflicto en el comentario o en las acciones del otro, soy yo quién debe cambiar esta decisión. No se nos indica aún esto, al principio bastará con que dejemos filtrarse la idea de que lo que ocurre, sólo tiene el poder de afectarme porque yo pienso que lo tiene, porque creo firmemente que los sucesos tienen significado por sí mismos.

Pongámonos en marcha.

Iniciemos pues el camino del cambio, optemos por elegir pensar de otra manera, seguros de que esta nueva forma de ver el mundo nos traerá paz, alivio y descanso a nuestras sobrecargadas mentes. Dejemos que el ES corrija, como Él mismo nos dice, con gran delicadeza nuestro sistema de pensamiento que tanto dolor y agotamiento nos causa. Sólo tenemos que escucharle cuando nos pide que simplemente bajemos la guardia, abandonemos la férrea protección que damos a nuestra tan adorada identidad del yo, y le demos permiso para efectuar los cambios.

Aceptemos que no sabemos cual es el significado de nada de lo que nos rodea, pero que debe haber algún modo mejor de enfrentarse a ello porque el actual es tremendamente doloroso, y dejémosle hacer a Él.



"Si estás dispuesto a renunciar al papel de guar­dián de tu sistema de pensamiento y ofrecérmelo a mí, yo lo corregiré con gran delicadeza y te conduciré de regreso a Dios." (UCDM)


Y sin demorarse ni un segundo, añadiría yo.


Feliz Año Nuevo. Feliz Curso Nuevo.

jueves, 26 de diciembre de 2013

Un nuevo Curso... Un nuevo camino.

Me he propuesto recorrer el camino que queda marcado por la obra Un Curso de Milagros. Este libro, que se compone de un tomo con el texto, otro tomo de lecciones, y un manual para el maestro, ha supuesto un verdadero cambio para mí.

Tengo la intención de ayudarme de estas letras virtuales para ir estudiando, poco a poco, todo el curso. En realidad llevo dos años haciéndolo, esta no es sino otra estrategia más para aprender, puesto que aquello que enseñas es lo que aprendes. "Enseña solamente amor, pues eso es lo que eres", dice el Curso.

TUVO QUE PASAR UN ACCIDENTE QUE ME DESPERTASE... Esta obra llegó a mí después de un accidente de esos inexplicables que te dejan unos días fuera de circulación. Por una maniobra extraña de mi tabla de surf, que saltó por los aires después de que una ola la clavase en la arena, la quilla cayó sobre mi ceja y mi ojo izquierdos. No perdí el ojo, afortunadamente, pero sí me quedé con la sensación de que cualquier cosa podía conllevar un peligro extremo, algo inasumible. La sensación de miedo. El miedo que hace que pienses que cualquier determinación que tengas en la vida no es más que papel mojado cuando las circunstancias te dan una bofetada.

Como siempre que me encontraba en un apuro, eché mano de mis maestros, en aquella ocasión Wayne Dyer, que dijo algo que se me quedó grabado a fuego. Citó la obra UCDM, concretamente mencionó las líneas del Capítulo 18, El final del miedo, en el apartado III, punto 3: "Si supieras Quién camina a tu lado por la senda que has escogido, sería imposible que pudieses experimentar miedo".  Así que conseguí la obra y comencé a leerla con atención.

LAS JUGADAS DE MI EGO... Al menos intenté leer con atención. Dedicaba muchas de mis horas a aquella obra que, aún a pesar de mis grandes dotes de lectora, curtidas en años y años de estudio y dedicación a la literatura, me era imposible comprender. Me quedaba dormida. Las palabras parecían quedarse sin significado. El único motivo por el que continuaba leyendo era la enorme energía cálida que me envolvía cada vez que me sentaba a leer. Eso, y la autoridad con la que aquellas palabras leídas resonaban en mi mente. Un libro al que tuve que dar vueltas porque no decía quién era el autor, se mostró como una obra importante, llena de vida. Pero como casi todo el mundo la primera vez que accede al libro, lo abandoné. Lo dejé en el capítulo veinticinco. Eso sí, aunque mi ego —burlón, insidioso, cansino y tentador— había ganado aquella batalla, yo le había ganado la guerra.

UN AÑO MÁS TARDE... Doce meses, después de aquel accidente que me obligó a despertarme de un tabletazo en la cabeza, retomé la obra UCDM. ¿Cómo? Bueno pues porque estaba desesperada. Había pasado los doce peores meses de mi vida. ¿No había el Curso cambiado mi vida? Sí, pero lo primero que ocurre cuando comienzas a estudiar el Curso es que "tu vida" —esa ilusión que antes te llenaba los sentidos— se desmorona. Literalmente, se derrumba, se destartala, se convierte en algo horrible...

Todo, con gran delicadeza, eso sí, un poco de ira, un poco de resentimiento, una pizca de "por qué a mi" y otras cuestiones que hacen que, cuando mires a tu alrededor, te preguntes qué haces aquí, si no hay algo mejor y qué sentido tiene engancharse a trabajos, personas, cosas —y filetes— que no duran mucho. Entonces me llegó, a través de un mensaje, un enlace a una obra —La desaparición del universo—, que me explicó con un lenguaje llano, las enseñanzas de UCDM. Más tarde, a lo largo de los meses, llegarían Enric Corberá, Nick Arandes, Philip Urso...

Pero lo más importante, vino a mí la obra original escrita por Helen Schumman —canalizando a Jesús—, y su estudio de Kenneth Wapnick. Volvió la energía, el conocimiento interior, la certeza. Volvió el Espíritu Santo —llámalo Guía Interior, o tu Ser Superior,si el lenguaje cristiano te chirría, a mí también me resultaba extraño, al principio—, volvió UCDM.

LA HISTORIA CONTINÚA... Es obvio, estoy en el mundo, sigo soñando que  vivo metida dentro de un cuerpo que morirá algún día, que este cuerpo tiene una historia, y que, de algún modo, debo oponerme a los acontecimientos que me suceden para mantener mi identidad y prestigio. (Si estuvieras aquí conmigo, me oirías reír ante estas ideas...je, je). Lo que sí puedo decir es que, todos los días,  intento que la pesadilla no me afecte tanto. Estudio el Curso, si quieres podemos estudiarlo juntos, y pido —a cada instante—, que el ES me ayude a perdonar, acceder a la paz que me compone, y volver a despertar en casa: el hogar del que nunca salimos para vivir la ilusión que nunca tuvo lugar... ¿y cómo no iba a poder concedérseme algo que ya es una realidad?

Bienvenidos, todos y todas los que queráis seguir adelante en este viaje, yo voy con vosotros/as.

viernes, 21 de junio de 2013

¿Cómo actuar en el tiempo? Una posible respuesta...

A raíz de un comentario realizado en mi blog, al que he respondido, me he decidido a incluir este texto como artículo, puesto que en la superficie, bien pudiera parecer que he abandonado este rincón. En el fondo, estoy preparándome para suponer una luz en un nuevo camino. Gracias Alejandro por este "pequeño empujoncito". Un saludo cariñoso a todos y todas. Es un placer contactar contigo, Alejandro. Como ves, hace muchos meses de mi último artículo en el blog. El motivo de este silencio es el cambio metafísico que experimento desde que estoy dedicada al estudio de Un Curso de Milagros, obra publicada por la Fundación para la Paz Interior. En este momento, mi objetivo se centra en recorrer el camino por el que me guían estos libros, así que te responderé con lo que he aprendido hasta ahora. Comentas que el tiempo físico es importantísimo, lo necesitamos para la realización de tareas. Desde mi perspectiva, el único tiempo que existe es el ahora. No existe ningún otro momento, no es el tiempo el que te permite realizar la tarea, sino la tarea lo que determina que ese tiempo tenga lugar. El hecho de que respires, trabajes, sientas el deseo de sonreír a alguien a quien tal vez no conozcas... Todas esas actividades determinan que el tiempo exista. El concepto de recaer en los errores del pasado no tendrá mucha importancia cuando comprendamos que retenemos el pasado para volver una y otra vez a él, para darle entidad. El motivo de que experimentemos los mismos errores es la creencia de que fueron reales. Una vez más, desde lo que yo creo ahora, el pasado no existe, no importa. Somos seres inmutables y perfectos, manifestemos eso que somos en el ahora, y para siempre. Dice Un Curso de Milagros que el presente te permite perdonar el pasado y liberar el futuro. Centrémonos pues en ese momento y dejemos ir el resto. En cuanto a la innovación para el cambio, nuevamente te remito a lo que se nos dice en esta obra, "No tienes ningún problema", no debes dar vueltas en tu mente a nada "déjame a mí todos tus asuntos", confía en que tu Ser Superior sabrá cómo enfrentar lo que parece ocurrir en todo momento, "Cuando descubras a tu mente planificando, detente". Así hallarás la paz. Termino con lo que te dije al comienzo: Ahora, mi aprendizaje se encuentra en este camino. Sé que para ti es importante guiarte dentro del mundo con garantías de realización personal y mejora. Para mí, lo único importante es conducirme hasta más allá de esa lucha constante, y encontrar la paz. Para esto, es fundamental que abandone cualquier creencia en la realidad del tiempo. Espero haberte respondido, y no crearte incertidumbre, aunque nunca está de más dudar un poco de todo, y dejar que sea nuestro corazón quien responda, ¿no crees?

martes, 6 de septiembre de 2011

Lo contrario al amor...

Es el título de una película que ha llegado hace poco a los cines, sin embargo, cuando uno termina esa frase "Lo contrario al amor...", el significado puede ir mucho más allá.

Si estuviésemos en una clase de lengua y nos preguntasen por el antónimo de amor, seguramente responderíamos "odio". El contrario de blanco es negro, el contrario de arriba es abajo...

Pero en la vida, nada está hecho de extremos contrarios. Todo se mueve en una línea continua y constante de evolución. En la vida, todo tiene siempre un matiz de gris, de movimiento. Nada es estático.

Así que, pensando en ese título, me he dejado guiar por Hoffman, Tolle y Osho, y me atrevo a responder que lo contrario al amor es el miedo. Podemos sentir odio por miedo a lo desconocido, por miedo a la pérdida, por miedo a que nos hieran... Es el miedo lo que se esconde bajo el odio, -esa sensación poderosa que nos lleva a enfocarnos en aquella persona o situación que no deseamos, manteniéndola presente en nuestras vidas.

Por eso te invito a que, si aún conservas algún sentimiento parecido al odio por algo o por alguien, reflexiones, y respondas a la siguiente pregunta: ¿A qué tienes miedo?, ¿cuál es ese temor que se esconde tras esa emoción que te mantiene atado a esa persona, a ese suceso?

Dice Osho que le gusta la oscuridad porque es el hecho que hace posible la luz. La oscuridad permite que el rayo de luz sea visible. Asimismo, el odio permite que descubras cuáles son tus temores. Cuando los veas, podrás enfrentarlos.

A veces el miedo a la vida, a levantarte cada día, te atenaza y te hace odiarlo todo. En ocasiones te odias incluso a ti mismo, hasta el punto de desear morir, salir corriendo y desaparecer.

Mi propuesta es que mires a tus miedos y pongas amor en ellos (ya sabes, lo contrario del odio, lo contrario del miedo es el amor). Cuando pones amor en algo, en alguien, creas el efecto opuesto al temor, al dolor, al rechazo, y permites que todo aquello en lo que estabas enfocado se transforme, cambiando toda tu vida.

El amor consigue llenarlo todo, impidiendo que cualquier sentimiento negativo se instale en tu corazón y tu mente. El amor, si es de verdad, si surge desde lo más profundo de ti, si es irradiado a todo y a todos..., no tiene contrario.

PD: ¿De verdad enciendes la luz para caminar por tu casa de noche por miedo a la oscuridad? No es necesario, tú eres un Ser de Luz.

domingo, 22 de mayo de 2011

Un tesoro en el bolsillo


Alguna vez, al ponerme un pantalón o una chaqueta que hacía tiempo no usaba, he encontrado en uno de los bolsillos un billete. ¿Te ha ocurrido? ¿Has experimentado esa inmensa alegría? De forma casual, al colocar la prenda, aparece un dinero con el que no contabas, algo que no esperabas en absoluto y te cambia la cara. Sientes la ilusión de un pequeño sueño que podrás hacer realidad, tal vez un capricho.

Sin embargo, si lo piensas bien, ese dinero es tuyo. Ya lo tenías en tu bolsillo antes de ponerte la ropa. No has ganado nada. No tienes nada que no tuvieras antes. Seguramente incluso, al final, acabarás gastándote ese dinero en cosas necesarias. Pero ese momento de felicidad absoluta que experimentaste al encontrarlo... No tiene precio.

Pues, si piensas en ello, tal vez llegues a la misma conclusión que yo cuando te digo que dentro de ti, tienes un inmenso tesoro escondido. Es un tesoro que tú mismo pusiste ahí, ya es tuyo. Pero te garantizo que la felicidad que experimentarás al encontrarlo, no puede compararse con ninguna cantidad económica.

Ese tesoro es tu esencia, tu ser interior, esa persona que eres dentro de ti y que solo tú conoces. Sé que cuando accedas a todo eso que eres, habrás encontrado tu mayor riqueza y no solo eso, podrás enriquecer tu vida y la de todos los que te conocemos.

PD: Yo ya sonrío al saber que muy pronto, nos enseñarás a todos lo increíblemente valios@ que eres.

martes, 22 de marzo de 2011

Ser significativos

El diccionario define significativo, en una de sus acepciones, como aquello que tiene importancia, valor o relevancia. Yo voy más allá, y creo que significativo puede ser aquello que te cambia la vida.

Debo reconocer que tengo mucha suerte porque he conocido, conozco, y cada día trato con gente muy significativa. Personas que sin duda han cambiado mi vida. Hombres y mujeres que me enseñan a seguir adelante sin importar las dificultades, los años, la soledad, el esfuerzo, y en ocasiones, el miedo.

Hay personas que te miran a los ojos y te transmiten todo su amor, admiración y respeto, y significan mucho para ti. Otras personas son significativas aún sin desearlo, estas últimas, se ofrecen por completo en cada instante, dan lo mejor de sí mismas, y casi sin pretenderlo,provocan que todo dentro de ti se vuelva distinto.

Hablo en mi libro de una persona, mi cuñada, la madrina de mi hija, Pauli, quien en un momento de mi vida, de pasada, durante una visita inesperada, me dijo unas palabras que sin duda despertaron algo en mí, y supusieron un cambio radical en mi vida. Sin quererlo, Pauli abrió una puerta que yo siquiera sabía que existía, y la persona que yo soy en realidad, y que en ese momento estaba dormida muy dentro de mí, salió a la superficie.

Como dije, hay personas que son significativas porque a veces sin darse cuenta de ello, te cambian la vida, -seguro que en este momento se te ocurren muchas personas que lo están siendo para tí- y agradezco que existan, y que se den a cambio de nada.

No quiero terminar esta entrada del blog sin compartir contigo las palabras que me dijo Pauli ese día, por si pueden suponer un cambio también para ti:

"Yo creo que si tienes un pensamiento positivo acerca de algo, ese algo termina ocurriendo en tu vida"


Te recordaremos siempre, Pauli, con una sonrisa.

jueves, 20 de enero de 2011

Frente a la casualidad, Posicionamiento.

Mi último artículo en el blog hablaba de dar las gracias por todas esas circunstancias aparentemente casuales que nos envían un claro mensaje personal acerca de nosotros, nuestra vida, y las decisiones que tomamos en cada momento.

Nada sabía yo de la que iban a montar los controladores, y hoy, al ver eso de que "se va a montar una buena", pues he tenido que reírme porque ciertamente, fue una de esas casualidades que sé que en su momento hablaron directa y claramente a algunos y algunas que leyeron la entrada.

Vuelvo a decirlo, por si alguien aún lo duda: No creo en las casualidades. Dicen que Dios utiliza la sincronía para obrar milagros, y se oculta en esas casualidades para manifestarlos. Yo creo que efectivamente, cuando estamos alertas y presentes descubrimos lo que ya sabemos, que el universo es un lugar amistoso que "trabaja" a nuestro favor, si nosotros sabemos corresponderle.

¿Y cómo podemos saber si efectivamente correspondemos al universo? Bueno, hace unos días leyendo el libro "La Ciencia de Ser Magnífico" (esta es una traducción propia para The Science of Being Magnificient"), de Wallace D. Wattles, - libro que recomiendo a quienes ya hayan recorrido este camino de volver por la senda que dejaron los autores de El Secreto-, vi que en uno de los capítulos hablaba de elegir conscientemente ejercer una moralidad impecable.

Y reflexionando sobre mis cosas, en otro momento, vino a mi, como una señal luminosa la palabra POSICIONAMIENTO. Sí, me posiciono, y lo hago porque no estoy dando una opinión. Es más, me posiciono para no tener que opinar si nadie me lo pide, pero para mostrar con mi ejemplo y actitud qué es lo que me sugiere cada situación. Me posiciono libremente en una actitud u otra, no para limitar tu libertad diciéndote lo que está bien o mal, sino para ejercer la mía, de actuar en la manera que creo correcta.

Y yo me posiciono del lado del universo: "El mayor beneficio para todos, y ningún mal para ninguno". De esta manera funciona la vida, esto es hacer las cosas pequeñas de un modo grande.

Me posiciono al lado de mis amigos, -y tengo muy buenos amigos controladores-, me posiciono al lado de la gente que reflexiona sobre los temas importantes de la vida, al lado de la salud y el respeto al propio cuerpo, a uno mismo y a los demás.

Me posiciono junto a tí, y te deseo todo lo mejor.